La motocicleta es uno de los medios de transporte más populares en todo el mundo. A diario millones de personas hacen uso de ellas para desplazarse, así como para practicar un deporte o recreación. A pesar de la gran adhesión y demanda con la que cuentan estos vehículos motorizados, su popularidad lamentablemente no las hace más seguras. Un porcentaje elevado de motociclistas fallecen o se lesionan gravemente producto de los accidentes en las carreteras.
El manejo y uso de medidas e implementos de seguridad adecuados, pueden marcar la diferencia entre la vida o la muerte para un amante de las motocicletas. Se ha comprobado que el uso del casco puede salvar la vida del conductor, y el pasajero, ya que reduce el impacto de las lesiones o daños en el cráneo. Estos imprescindibles implementos de seguridad salvan las vidas de los motociclistas al evitar o amortiguar los golpes y las heridas en la cabeza. Los motociclistas que no utilizan un casco tienen un porcentaje más alto de probabilidades de muerte o sufrir lesiones permanentes.
Seguridad vial: Razones e importancia para el uso del casco cuando viaje en moto
Los motociclistas que usan el casco tienen un 73% menos de mortalidad que los que no usan el casco.
Los motociclistas que usan el casco tienen hasta un 85% menos de lesiones graves que los que no usan casco.
Algunas otras estadísticas sobre la importancia del uso del casco provenientes de diversas fuentes especializadas señalan que:
2 de cada 3 accidentes de moto tienen lugar dentro de zonas urbanas. Debido a que en carretera el casco tiene un uso generalizado, la mayoría de conductores lo utilizan; mientras que en la ciudad siempre es un asunto pendiente para los motociclistas.
La mayoría de las muertes ocurridas a causa de accidentes de moto se producen como efecto de las lesiones cerebrales y un gran porcentaje de éstas son una consecuencia de no usar el casco.
El índice de mortalidad de motociclistas en los accidentes cuando no se encuentran utilizando un casco, es tres veces mayor que quienes si lo utilizan.
Las cifras indican que en las lesiones a causa de accidentes de moto más del 67% se centran en el cráneo o en el cuello.
En casos de un accidente el casco absorbe gran parte de la energía del impacto con su estructura, y el cerebro golpea contra las paredes del cráneo con menos fuerza. Dispersa además la fuerza del impacto hacia una superficie más grande por lo que la energía del choque no se concentra tanto en una sola parte de la cabeza. Finalmente actúa como una barrera que evita el contacto entre el cráneo y el objeto del impacto (por ejemplo, el suelo).